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Creer para ver

Por lo general para que algo sea cierto para nosotros debemos verlo, y al verlo tener la certeza de que es cierto, sin embargo la palabra de Dios nos enseña que debemos creer para poder ver.

 La fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. Hebreos 11:1

 Veamos este pasaje bíblico en el cual Tomás, uno de los discípulos de Jesús tuvo que ver para creer.

 Le dijeron, pues, los otros discípulos: Al Señor hemos visto. El les dijo: Si no viere en sus manos la señal de los clavos, y metiere mi dedo en el lugar de los clavos, y metiere mi mano en su costado, no creeré.

Ocho días después, estaban otra vez sus discípulos dentro, y con ellos Tomás. Llegó Jesús, estando las puertas cerradas, y se puso en medio y les dijo: Paz a vosotros.

Luego dijo a Tomás: Pon aquí tu dedo, y mira mis manos; y acerca tu mano, y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente.

Entonces Tomás respondió y le dijo: !Señor mío, y Dios mío!

Jesús le dijo: Porque me has visto, Tomás, creíste; bienaventurados los que no vieron, y creyeron.

Juan 20:25-29

 En este pasaje vemos que Tomas, siendo discípulo de Jesús no solo tuvo que verlo sino que también tuvo que tocar sus heridas y entrar la mano en Su costado para poder creer que Jesús había resucitado. A pesar de que Jesús ya les había dicho a sus discípulos que resucitaría al tercer día (Lucas 9:22), aun así Tomás no creyó en la palabra dicha por Jesús.

Como cristianos siempre debemos creer a la palabra dicha por Dios porque El es fiel y justo y cumple sus promesas. Se nos pueden presentar dificultades y adversidades en nuestras vidas, sin embargo, la palabra de Dios nos motiva a que le creamos a Dios, a que creamos en que El es poderoso y fiel a su palabra. Él no nos desampara y nos ama con amor entrañable.

En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan. Hebreos 11:6. 

  • Debemos recordar siempre lo que dijo Jesús a Tomas, somos bienaventurados cuando creemos sin haber visto. (Juan 20:29)
  • Debemos vivir por Fe no por vista. (Romanos 1:17)
  • Al que cree Todo le es posible. (Marcos 9: 23-24)
  • Debemos creer para ver, no ver para creer.

Sarah Yuritza

 

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